miércoles, 24 de febrero de 2016

Conversaciones. Parte 3 - El cuerpo como lugar de encuentro


- ¿Para llegar al sentir consciente qué papel tienen la razón y la lógica?

La manera de aproximarnos al sentir consciente no tiene nada que ver con la razón ni con la lógica. Nos han acostumbrado a aproximarnos a la vida a través de la lógica y la razón, sobre todo a partir del siglo XVIII. Pero ahora la aproximación a la vida va a ser a través del sentir, del intuir y del percibir. Por suerte esto es algo que tenemos por naturaleza, no es algo que tengamos que ir a buscarlo fuera, es una herramienta que nos  pertenece

Cuando comenzamos a usar la herramienta del sentir consciente vamos a ponernos en ese lugar en donde está el sentir y desde ahí va a salir de una manera natural, vamos a ver de una manera natural qué es lo que hay.

- Entonces, al sentir consciente ¿podemos llegar todos?

Exactamente. Al sentir consciente podemos llegar todos porque son una serie de cualidades que forman parte de nuestra naturaleza. No es nada ajeno a nosotros.

- El sentir consciente lo podemos usar para salir de esas situaciones en las que sentimos que repetimos, nos repetimos y no conseguimos dar una respuesta diferente ¿verdad?

Si. El cuerpo y la mente hacen un perfecto equipo. El cuerpo que está en su lugar y en su espacio sustenta y recoge a la mente y de ahí salen las respuestas.

- ¿Cómo llegamos a ese lugar en el que discurre la vida, ese lugar llamado territorio?

En ese lugar dónde discurre la vida, dónde hay movimiento, sobre todo dónde está la información, es donde está el sentir. Ese lugar donde todos tus sentidos, aquellos que conocemos y los que no, se despliegan, se desarrollan para captar, para ver, para leer todo lo que está pasando. 

Llegamos a este lugar a través del cuerpo. Nuestro cuerpo es un vehículo, no es un fin. El cuerpo al tener movimiento, vibración es un vehículo que nos va a aproximar a ese espacio. Hay una serie de ejercicios, podemos llamarlo algo así como "gimnasia del sentir" que te va a permitir conectarte con tu cuerpo y a través de él llegar a ese espacio que tiene esa misma cualidad.

La gimnasia del sentir no solamente te va a servir para detectar qué es lo que está pasando, qué es lo que te está sucediendo, sino que también servirá para volver. En el momento en el que estamos en la mente, que es donde normalmente estamos, la gimnasia te va a posibilitar es volver al cuerpo, volver a la vida, volver a las tres dimensiones y dejar de estar en la mente. La mente es ese lugar donde solamente hay acción-reacción.

Tenemos protones, neutrones y electrones, cuando volvemos al cuerpo, volvemos a experimentar cada uno de ellos.

- Cuando experimento eso, ¿como vivo lo que me está pasando de una forma distinta o  cómo lo transformo ?

Al experimentar esa energía débil, que no fluye, que no está permitiendo, lo que hacemos es darle lugar, darle espacio, lo reconocemos. Sea lo que sea que nos hayamos encontrado, sentido o visto, solo tenemos que darle espacio, reconocerlo.  Es como si fuéramos el observador y es desde esa observación que actúa el cambio de la energía que estaba en el lugar equivocado y que nos estaba debilitando, separando y haciéndonos sufrir. 


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